FALCON CREST...

América, en venganza de nuestra colonización, nos invadió los televisores con los "culebrones", antes del famoso "Cristal", ya habíamos gozado de Dallas, Santa Barbara o el famosísimo Falcon Crest, que hizo furor en los años 80, la verdad es que no creo que haya una sola persona que creciera en esa década y en las anteriores que no haya visto al menos un capítulo de esta serie, que no haya oido esta sintonía que durante tantos años era la más oida en las sobremesas de nuestros hogares.

La trama transcurria en California, y como en todos los culebrones estaban los buenos buenísimos, la familia Gioberti, con Chase y Maggie a la cabeza, de tan buenos que eran daban un poco de grima, y por otro lado los malos malísimos, la familia Channing, con Angela a la cabeza, y su nieto Lance (protagonizado por el "buenorro" Lorenzo Lamas, el rey de las camas).

Es dificil poder contar la trama de un culebrón, porque los que empiezan siendo hijos de tal, acaban siendo hijos del otro, los que en principio son malos acaban convirtiendose en buenos, de los personajes iniciales, después de "2350 capítulos", sólo queda uno o dos. La trama se enreda de tal manera que al final ya la serie ha cambiado completamente.

Pero es indiscutible que algo tenía esta serie, que la guerra entre estas dos familias por la producción vinícola y por los viñedos , asi como otras historias paralelas, de amor, odio, traiciones, encuentros y desencuentros tenían a la audiencia pegada al televisor todas las tardes después del telediario.

Y a pesar de tener la calidad que tienen ¿Quién no recuerda a Angela Channing o a Chu Li?.

Y con estas palabras finalizaba uno de los culebrones de aquella década que tantos recuerdos nos dejó;

Espero que el recuerdo os haya arrancado una sonrisa....